Diario Río Negro

Monitorean vía satelite a pumas en Laguna Blanca

Compartimos un artículo publicado en el Diario Rio Negro sobre los proyectos en monitoreo de pumas llevados a cabo en el Parque Nacional Laguna Blanca. En uno de ellos, y junto a otros investigadores, participa el Dr. Andrés Novaro, Investigador de CONICET en el INIBIOMA/UNCo y en la ONG Wildlife Conservation Society (WCS).


Buscan aportar estrategias que permitan la convivencia de los felinos con los humanos. Los rastrean con collares y GPS. Además están probanco métodos disuasivos para alejarlos de los corrales.

En el Parque Nacional Laguna Blanca con ayuda de tecnología de punta se comenzó a recolectar información sobre los pumas y de esta manera generar datos para sugerir estrategias que permitan la coexistencia de la especie con los seres humanos. Esto debido al conflicto que tienen los crianceros con la matanza del ganado por los pumas.

Desde hace tres semanas se empezó a recabar datos con radio collares que se colocaron a estos felinos. Estos aparatos registran vía satélite información sobre el movimiento de los pumas.

“El estudio tiene dos objetivos principales. Primero, entender la ecología de los pumas en un paisaje impactado por el ser humano, donde las presas naturales como el guanaco han desaparecido y el puma está expuesto a una base de presas exótica como el ganado. Segundo, sugerir estrategias que permitan disminuir el conflicto”, señaló el licenciado en Ciencias Biológicas y doctor en Ecología, Emiliano Donadio, que integra la Fundación Flora y Fauna Argentina.

El proyecto se extenderá por tres años. Comenzó hace tres semanas con la captura de dos pumas, a los que se los equipó con radio collares.

El investigador explicó que el primer paso es capturar a los pumas. Para esto se emplean trampas cepo compuestas por lazos de cable acerado anclados a una roca. Cuando cae el felino pisa la trampa, una de sus patas delanteras queda atrapada en el lazo. Entonces, los investigadores se aproximan y duermen al puma utilizando un rifle de dardos.

“Tenemos unos 45 minutos para proceder. Tomamos diferentes medidas, estimamos la edad en base al desgaste de los dientes, vemos si es macho o hembra, y les colocamos el radio collar”. Luego de ese tiempo se revierte la anestesia, el animal despierta y es liberado en el mismo sitio de captura. En ese momento comienza el seguimiento.

Por ahora se monitorea a una hembra y un macho. “Esperamos capturar unos 10 animales en total, algo que nos va a llevar entre 10 y 12 meses”, estimó.

“Las trampas se colocan en donde encontramos huellas o heces de pumas. Una vez colocadas, las trampas se revisan dos veces por día: a la mañana y la noche. “, detalló.

El radio collar explicó que tiene tres componentes. “El VHF que es una radio de onda corta que se puede rastrear con antenas en el campo, un GPS que registra la localización geográfica del animal, en este caso cada una hora y una antena que le permite al collar conectarse con un satélite para transmitir esas localizaciones directo a un mapa en internet donde podemos observar el uso que el animal hace del territorio”, describió.

Este proyecto forma parte de un programa regional, con investigaciones en la reserva San Guillermo (San Juan), en el Parque Nacional Monte León (Santa Cruz) y en el Parque Patagonia (Santa Cruz).

El investigador diferenció que el que se realiza en Neuquén “es el más focalizado en temas de conflicto entre fauna y seres humanos por el problema que tienen los crianceros en relación con las pérdidas que sufren por depredación”.

Del proyecto en Laguna Blanca participa personal del CONICET, la ONG Wildlife Conservation Society (WCS) y de la Universidad de California-Berkeley. Cuenta con el apoyo de Parques Nacionales, la ONG Conservación Patagónica Asociación Civil de San Martín de los Andes.

Al respecto agregó que el trabajo se suma a otro proyecto ya existente en Laguna Blanca que investiga los elementos disuasivos que puedan usar los crianceros para evitar que los pumas maten sus animales. (ver recuadro).

El biólogo indicó que este nuevo estudió aportará datos sobre la ecología y el movimiento del puma que permitirán evaluar el éxito del uso de mecanismos disuasivos.

Entre otros aspectos, los investigadores esperan evaluar cómo se mueven los pumas, qué estrategias usan para cazar y si hay algunos individuos que tengan mayor predisposición a atacar al ganado.

Un proyecto sobre métodos disuasivos en el lugar

“Estamos hace tres años trabajando en Laguna Blanca con los crianceros de cabras y ovejas buscando métodos para prevenir el ataque al ganado por parte de los pumas y zorros”, expuso Andrés Novaro, investigador del CONICET-INIBIOMA y de la ONG WCS-Argentina sobre el otro proyecto que se realiza en Laguna Blanca.
En el parque nacional lindante a la ciudad de Zapala se estudia un método dirigido al lugar donde duerme el ganado. “Se prueba con luces que se ponen en los corrales. Durante el día se cargan con un panel solar que tienen incorporado, y durante la noche emite una luz intermitente que se pone en los cuatro costados del corral”, especificó Novaro.

“En otros países se ha probado este método para repeler carnívoros y funciona bien”, comentó.
Contó que ya hay cinco crianceros que usan este método.
“Todos los meses llevamos el registro de cuántos ataques tienen en los corrales y en corrales vecinos que no tienen luces. Hay algunos ataques ocasionales pero parece ser menor la frecuencia de ataque que los crianceros que no tienen estas luces”, expresó.
Aclaró que este estudio funciona de manera integrada con el otro que estudia a los pumas a través de radio collares.
“Con estos dispositivos podremos ver si los pumas se desplazan de una manera que evita los corrales que tienen luces y de esa manera entender cómo funciona el dispositivo”, señaló.
Además se aprovecha el estudio para ver la eficacia de perros protectores que viven con el ganado y lo protegen de manera continua de los depredadores.
“En la zona uno de los pobladores tiene una de las razas de perros que provee el INTA como protectores del ganado y en unos días llevaremos un perro mestizo, que es más chico y más barato para mantener. Estos perros los probamos junto al Centro de Ecología Aplicada de Neuquén desde hace 15 años. La idea es ver el comportamiento del puma en los rebaños con perros”, apuntó.

Recopilación de datos Vía satelital

“Lo que se obtiene vía satélite, se va almacenando en planillas de cálculo y después que tenés datos de varios meses se hace un análisis sobre cómo los pumas usan el espacio”, comunicó el investigador.
Donadio explicó que en el seguimiento cuando ven que en el mapa hay una superposición de puntos que en este caso se actualizan cada una hora significa que el animal está detenido en un lugar.
“Eso nos da la idea de que el animal estuvo durmiendo ahí o que cazó algo”, contó.
Cuando esto ocurre los investigadores acuden en algunos caso al sitio.
“ Entonces estudiamos qué come el animal, dónde lo mata, cómo lo mata, y qué estrategias utilizó el animal para cazar”, explicó.
“El plazo mínimo del estudio es de dos a tres años, que es lo que dura la batería de los collares. “Nuestra intención es mantener el proyecto por unos cinco a diez años, pero depende del financiamiento”, dijo.
Reflejó que en el proyecto que se hizo en San Juan en tres años se obtuvo información de 450 presas y apuntó que fue el primer lugar del país que se estos collares para investigar la fauna.
La tecnología es novedosa y se aplicó en otras regiones del país para estudiar otras especies animales.

Por Gabriel Dal Piva del Diario Rio Negro.