¿Cuánto saben los vecinos de Bariloche sobre las cachañas?


Un grupo de investigadores invitan a la comunidad a responder una encuesta sobre estos “loros patagónicos” que se suelen observar en la ciudad “antes de las nevadas”.

Por Cecilia Russo.

Todo el mundo dice, “en invierno aparecen las cachañas cuando va a nevar”, pero ¿qué pasa realmente cuando estos loros patagónicos bajan a la ciudad? Para responder esta cuestión, un grupo de investigadores del CONICET realiza un estudio especial para identificar las amenazas que sufren estos animales.

Desde GrInBic (Grupo de Investigaciones en Biología de la Conservación) lanzaron una encuesta para tratar de entender qué les pasa a la cachañas (Enicognathus ferrugineus) en Bariloche o en cualquier lugar de los Andes patagónicos. “Se trata de hacer ciencia ciudadana. La idea es poder sumar el aporte de la gente  interesada y que observa cuestiones importantes o curiosas de la biodiversidad a las investigaciones científicas”, explicó a ANB la doctora en Biología, Karina Speziale.

Y agregó: “Eso a los científicos nos viene muy bien, más con estos loros que se mueven tanto; para nosotros es muy difícil seguirlos y poder analizar de manera eficiente qué cosas les pasan. Teniendo muchos ojos observando, con los vecinos que tengan ganas de ayudarnos, podremos  encontrar mucha más información para responder nuestra pregunta”.

Por eso, desde el grupo de investigaciones convocan a los vecinos a participar de una encuesta para identificar las amenazas que sufren las cachañas. Se puede acceder a la misma a través del siguiente link.

“Son preguntas sobre amenazas que puedan estar viviendo estos loros patagónicos cuando llegan a la ciudad. Sabemos que las cachañas son atropelladas, se electrocutan, se chocan con alambrados o se las come alguna mascota. Son distintas problemáticas que sufren para las cuales nos gustaría contar con el conocimiento de la gente sobre qué les está pasando a estas aves y poder cuantificarlo”, señaló la bióloga.

La encuesta está dirigida a los habitantes de toda la zona que abarca la cachaña, que es Patagonia de Argentina y Chile. “Lo único que les pedimos es que puedan reconocerlas. En nuestra región no hay otro loro, excepto en Neuquén que se pueden observar los barranqueros (Cyanoliseus patagonus) mientras que en Chile está también el choroy (Enicognathus leptorhynchus)”, especifico Speziale.

GrInBic es un grupo de investigadores, becarios, estudiantes y personal de apoyo, dependientes del INIBIOMA (Instituto de Investigaciones en Biodiversidad y Medioambiente), un instituto de bipertenencia entre  CONICET – Argentina (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas) y la Universidad Nacional del Comahue.  Su lugar de trabajo se encuentra en el Laboratorio Ecotono, en Bariloche.

Se trata de un equipo interdisciplinario de trabajo con intereses de investigación centrados principalmente en la conservación de la diversidad biológica.

Cahcañas y araucarias

Las cachañan podrían estar contribuyendo a la preservación de la araucaria, el árbol emblemático de la región. “Su interacción es antiquísima, y siempre se vio a este animal como el depredador de piñones. Sin embargo, encontramos que además de comer esta semilla, la cachaña puede dispersarla y favorecer la regeneración del bosque”, contó la referente de CONICET. Esta interacción es importante tanto para la cachaña, ya que el piñón es su alimento principal durante el otoño y el invierno cuando hay muy poco alimento nativo en los bosques de la región, como para la araucaria por la dispersión de sus semillas a larga distancia que hace la cachaña.

Y agregó: “Hoy en día, el bosque de araucarias está sometido a mucha presión por ganado, por jabalí, por ciervos, que también consumen muchísimo el piñón. Por lo cual podría estar pasando que la cachaña, en su hábitat natural, encuentra reducida la cantidad de semillas de esta conífera y se tiene que mover a las ciudades donde no encuentra este recurso que tiene en los bosques naturales pero encuentra otros”.

“De hecho – prosiguió la Speziale - consume plantas introducidas que en una investigación reciente encontramos que proveen la misma calidad nutricional que el alimento que encuentra en el bosque nativo y encima en las ciudades se suman otras amenazas”.

“Creemos que esta interacción es tan fuerte que, si la cachaña empieza a sufrir una declinación poblacional por las amenazas que tiene en la ciudad, tal vez podamos ver un efecto negativo también en el bosque de araucaria”, concluyó la doctora. Por eso es tan importante contar con la ayuda de los vecinos para entender qué les pasa a nuestros loritos cuando los vemos en las ciudades. (ANB)

Publicado en ANBARILOCHE