INSTITUCIONAL

Caza legal de guanacos, pumas y zorros: una práctica que desvía el camino a la coexistencia entre la producción ganadera y la conservación de la biodiversidad

Declaración del Instituto de Investigaciones en Biodiversidad y Medioambiente (INIBIOMA) sobre la caza legal de guanacos, pumas y zorros: evidencias y propuestas para el tratamiento de esta problemática.


Crédito Ecovida Ambiente

Como viene sucediendo desde hace varios años, algunas provincias patagónicas han vuelto a autorizar la cacería de especies autóctonas de alto valor ecosistémico, como los guanacos, pumas y zorros, para atender el reclamo del sector ganadero que implica bajar las cargas de estas especies. Sin embargo, está comprobado que estas medidas anacrónicas y facilistas no solucionan este conflicto. Es necesario que esta problemática sea abordada desde un enfoque que considere las nuevas metodologías y herramientas de producir en armonía con la conservación de la naturaleza. Este nuevo paradigma, que apunta a la coexistencia entre el sistema productivo y la fauna nativa, requiere encarar aspectos de fondo que permitan empezar a transitar un camino hacia la sustentabilidad de las prácticas actuales, atendiendo las distintas aristas, ecológicas, sociales y económicas, de esta problemática compleja.

Estas normativas que exponen a la fauna nativa como el único responsable de la merma en la producción ovina, enmascaran las verdaderas causas del fuerte deterioro de los ambientes patagónicos. La crisis climática sumada a las malas prácticas ganaderas y la sobreexplotación de los recursos forrajeros durante décadas condujeron a la degradación de los pastizales. Esto, combinado con la crisis del mercado de la lana de oveja y eventos naturales disruptivos como las erupciones volcánicas, resultó en un abandono progresivo de los campos y derivó en la recuperación de las poblaciones de carnívoros y herbívoros nativos en algunas regiones, particularmente en las provincias de Santa Cruz y Chubut. Las autorizaciones de caza legal recientemente emitidas responden a una percepción negativa del sector ganadero al incremento de algunas poblaciones de estas especies nativas.

En este documento de postura institucional se presentan algunas evidencias importantes que deberían ser abordadas para el tratamiento de esta temática y que surgen del consenso de diversas organizaciones1 especialistas en esta problemática:

  • Las especies nativas como el guanaco, el puma y el zorro colorado poseen un papel fundamental en los ecosistemas naturales de la Patagonia, relevante para la dinámica ecológica de la región.
  • La posibilidad de un desarrollo productivo en armonía con la conservación de la flora y fauna nativa de la región patagónica no sólo existe, sino que ya ha sido probada por diferentes instituciones en situaciones diversas. Este puede incluir la diversificación productiva y el desarrollo de estrategias basadas en el uso sustentable de recursos naturales autóctonos, en beneficio de las comunidades locales y de la conservación de las especies nativas. Incluyendo la posibilidad de acceder a incentivos por contribución a la producción de servicios ecosistémicos, créditos de carbono y biodiversidad, etc. 1 Organizaciones participantes: Aves Argentinas; Comisión de Supervivencia de Especies de la UICN para Meso y Sudamérica; Comité Argentino de la UICN; Fundación Ambiente y Recursos Naturales, Fundación Patagonia Natural; Fundación Vida Silvestre Argentina; Grupo Especialista en Camélidos Sudamericanos (GECS) de la UICN. Mayo 2024.
  • Existen actualmente diversas herramientas alternativas al control letal, que han sido muy estudiadas, y que permiten un manejo amigable de predadores nativos, como el uso de animales protectores del ganado incluyendo razas de perros guardianes, llamas, burros, etc., bajo un sistema de pastoreo ordenado de tipo rotativo para que puedan ejercer eficientemente su acción. Se debe considerar, además, que los sistemas de pastoreo continuo además de tener un rol importante en Patagonia en cuánto a favorecer los procesos de desertificación, facilitan el trabajo del depredador al estar los individuos aislados. A esto se suman otras técnicas como el uso de sistemas de alarmas y luces disuasivas, manejos supervisados del rebaño durante la parición, etc.
  • El problema de la desertificación que sufre la región patagónica deriva de la historia de mal uso y un manejo inadecuado de la carga ganadera y del tipo de sistema de pastoreo de herbívoros domésticos, y no de la presencia del guanaco, según numerosas evidencias científicas y técnicas. Un manejo adecuado del ganado y de los recursos forrajeros favorece la coexistencia entre herbívoros domésticos y nativos.
  • Estudios científicos dan cuenta de que la mayoría de los depredadores tope (como los pumas) depredan en muy baja proporción sobre animales domésticos cuando las poblaciones de presas nativas se encuentran por encima de ciertas densidades mínimas. Además, las poblaciones sanas de depredadores, previenen explosiones demográficas de especies herbívoras como liebres europeas y guanacos, y contribuyen a mantener bajas las densidades de meso-depredadores como el zorro colorado. Existen evidencias de que los perros domésticos o asilvestrados suelen generar mayores daños al ganado que los carnívoros nativos, contribuyendo a la confusión y perpetuando la estigmatización de los carnívoros silvestres.
  • La convivencia con el guanaco, los pumas y los zorros colorados, requieren posibles acciones de manejo como la implementación de actividades de uso sostenible del guanaco y la correcta identificación y manejo de individuos “problema” de carnívoros. Es importante resaltar que no todos los individuos de una misma especie depredan sobre el ganado doméstico, por lo tanto, la caza indiscriminada puede remover un individuo que no poseía dicho comportamiento y abrir el territorio a la llegada de otro que sí podría ser un “problema”. Estas acciones deben ir de la mano del delineamiento de programas y planes de conservación y manejo con evidencia científica, que aseguren poblaciones saludables de las especies.
  • Es necesario identificar claramente los problemas o conflictos existentes entre la fauna y las actividades productivas. Luego, analizar diferentes alternativas para reducir los mismos en las diferentes regiones de Patagonia es crucial. Esta evaluación debe ser contextualizada, y no generalizada, atendiendo las particularidades de los distintos tipos de productores y sus características socioeconómicas.
  • Estos programas y planes deben implementarse bajo la fiscalización de las autoridades competentes de las provincias. Además, deben incluir la implementación de esquemas de trazabilidad de los productos obtenidos y la conformación de comisiones o mesas de trabajo interdisciplinarias e intersectoriales. Los organismos nacionales deben monitorear este accionar en su calidad de autoridad administrativa y científica, ya que son los designados para implementar las recomendaciones emitidas por la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES) a nivel nacional e internacional.
  • La realización de relevamientos poblacionales para estimar la densidad y abundancia de estas especies, deben ser realizados por expertos, con metodologías similares o comparables, actualizadas y validadas. Dichos relevamientos son muy necesarios, ya que son una herramienta fundamental para la toma de decisiones en un manejo adaptativo. La autoridad provincial de aplicación de la legislación vigente, en conjunto con las autoridades nacionales correspondientes, debe ejercer un fuerte liderazgo en los aspectos técnicos referidos a la definición de las metodologías de manejo de estas  especies teniendo en cuenta el principio precautorio.
  • La apertura de permisos para las temporadas de caza de guanacos, pumas y zorros con números arbitrarios de piezas por cazador; el incentivo de regímenes de recompensas para la caza de pumas y zorros sin contar con estudios poblacionales previos ni evaluaciones del impacto ambiental, y sin ponderar otras prácticas diferentes para la protección del ganado (como perros protectores de ganado, uso de disuasivos), o la falta de estudios que describan la problemática que han suscitado los regímenes de recompensa referidos; son normativas que van en detrimento de la conservación de la biodiversidad, del manejo sustentable y de un abordaje integral de la problemática.
  • Fortalecer las capacidades de las comunidades locales involucradas en el manejo de la biodiversidad, establecer una valoración adecuada de los recursos ecosistémicos, eliminar variables que restan valor a estos bienes y reemplazarlas por incentivos locales enfocados en lograr buenas prácticas de manejo, son algunos de los desafíos que plantea el uso sustentable y la distribución justa de los beneficios derivados de los recursos naturales. Por lo tanto, es necesario reconocer la diversidad de factores sociales y culturales que afectan el uso de los recursos naturales y desarrollar políticas públicas para el manejo del ecosistema centradas en la conservación de la biodiversidad y en el desarrollo sustentable.

En virtud de lo expuesto, solicitamos a las autoridades pertinentes de las provincias patagónicas revertir estas normativas e impulsar mesas de trabajo en conjunto con los sectores científico- académico, de productores, instituciones públicas de producción, organizaciones de la sociedad civil y legisladores para lograr directrices tendientes a favorecer la coexistencia entre la vida silvestre y la producción ganadera. Como Institución de referencia en esta materia nos ponemos a disposición para colaborar en la generación de soluciones responsables y duraderas que estén basadas en evidencia.

 

 

Contactos de referencia

1- Grupo de Investigación en Ecofisiología de Fauna Silvestre. GIEFAS-INIBIOMA-CONICET-UNCo
Dr. Pablo Carmanchahi. Investigador Principal. INIBIOMA-CONICET-UNCo
Mail: pablocarman@comahue-conicet.gob.ar
Página web: https://giefasconicet.wixsite.com/giefas
El GIEFAS trabaja hace más de 20 años en el desarrollo y transferencia al sector productivo de metodologías de aprovechamiento sustentable de la fibra de guanacos silvestres siguiendo
estrictos protocolos de buenas prácticas de manejo basados en la seguridad de los operarios y en el bienestar de los animales manejados.

2- Grupo de Investigaciones en Biología de la Conservación, INIBIOMA-CONICET-UNCo
Mail: grinbic@comahue-conicet.gob.ar
https://linktr.ee/grinbic
El GRINBIC trabaja en varios temas relacionados a la coexistencia humanos y fauna, incluyendo la evaluación de conflictos y soluciones para la depredación por parte de aves rapaces y
mamíferos.

3- Grupo Biología y Ecología de Animales Patagónicos (BEAP), INIBIOMA (UNComa-CONICET)
Mail: beap@comahue-conicet.gob.ar Página web: https://inibioma.conicet.gov.ar/zoologia/; IG: @beap_arg
Desde 1984 nuestro grupo se dedica al estudio de la fauna silvestre nativa y exótica con el propósito de contribuir a su conocimiento y capacidades de gestión. Una de nuestras líneas actuales, trabajada en conjunto con la APN, se enfoca en reorientar los sistemas productivos para lograr una mejor convivencia con herbívoros y depredadores nativos en corredores biológicos entre áreas naturales protegidas de la Cordillera norpatagónica. A su vez, sumamos experiencia de integrantes de nuestro grupo, en desarrollo de protocolos de manejo sostenible (incluyendo manejo sostenible del pastoreo, bienestar animal, manejo de depredadores y herbívoros nativos, etc.) y su implementación en sistemas ganaderos bovinos, ovinos y de producción de otros tipos de fibras (por ej. Yak, Moahir, etc.), en Patagonia, Sudáfrica, US, Mongolia, Australia, China, Región de Pampas y Campos (Argentina, Paraguay, Uruguay y Brasil), etc.