Buscadores de tesoros en la calle Mitre



A principios del siglo veinte una pequeña colonia se mostraba pujante a orillas del lago Nahuel Huapi. Los primeros pobladores asentaron sus típicas casas de montaña rodeando la plaza principal y comenzaron a esbozar una ciudad que hoy alberga a más de 120.000 habitantes.

Cada mediodía, mientras los obreros de la calle Mitre almuerzan, un grupo de arqueólogos, paleontólogos, historiadores y geólogos revisa las excavaciones buscando fragmentos de historia que ayuden a reconstruir la cotidianeidad del 1900.

Los trabajos comenzaron en marzo pero recién hace un mes lograron dar con un importante hallazgo que incluyó infraestructura que se utilizaba en los años fundacionales de San Carlos de Bariloche.

“Se puede empezar a construir la organización” de la ciudad, explicó la arqueóloga Solange Fernández Do Rio al mencionar los elementos encontrados en la cuadra de Mitre al 600.

En la esquina de John O´Connor una retroexcavadora rompió la carpeta asfáltica y, tras retirar un montículo de tierra, se descubrió un sistema de drenaje compuesto por una fila de barriles de madera que alguna vez guardaron litros de vino.

Fernández detalló que los barriles estaban enterrados apenas a 40 centímetros de la superficie y por encima de ellos una hilera de tablones protegía la estructura. Si bien la investigación aun está en curso, la especialista estimó que el desagüe fue utilizado para encausar una caída de agua que provenía desde una ladera.

Un laboratorio de análisis del Centro Atómico tendrá a su cargo el estudio de los sedimentos depositados en el fondo de la rústica tubería, permitiendo además conocer el clima de aquel entonces.

Los testimonios que lograron recolectar mencionan que hacia 1920 algunos barilochenses se habían mudado a esa zona, así lo dejan saber algunas botellas y pedazos de vajilla que también componen el suelo del lugar.

“Esto también tiene que ver con arqueología histórica”, afirmó Fernández sobre un proceso que incluye los comentarios de vecinos que se acercan hasta las distintas excavaciones para traspasar un poco de la historia reciente.

A pocos metros de allí también se divisó una estructura de ladrillo que -estiman- podría ser una zapata que sostenía una estructura superior, y algunos troncos que se usaban como palenques para atar caballos en cada esquina.

A lo largo de las tres cuadras que están en proceso de remodelación, el equipo de profesionales también pudo identificar caños de cerámica que se utilizaban en la década del 40 para transportar agua y que no figuran en los planos de la ciudad.

Cada elemento encontrado es una oportunidad de “recuperar memoria”, entendió la arqueóloga que se mostró emocionada por armar “una gran historia a partir de los relatos”.

La máquina del tiempo

Lejos de tratarse de un relato de ciencia ficción, la arqueóloga Solange Fernández Do Rio cree que los materiales le hablan: “es como una especie de maquinita del tiempo sin tener que viajar”, imagina.

Fernández coordina el proyecto de conservación junto al reconocido especialista Adam Hajduk, protagonista de otras excavaciones que dieron a conocer la vida de los asentamientos indígenas que poblaron la región.

La posibilidad de reencontrar a una comunidad con sus orígenes llamó la atención de varias instituciones. Es por eso que, además del Museo de la Patagonia (Parques Nacionales), se incorporaron el Instituto de Investigaciones en Biodiversidad (Conicet), el Instituto de Investigaciones en Diversidad Cultural y Procesos de Cambio (Conicet), la Universidad del Comahue, el Centro Atómico Bariloche y el municipio a través de la Subsecretaría de Medio Ambiente. El objetivo es claro: proteger el patrimonio cultural.

“Logramos conformar este equipo, queremos que siente un precedente”, explicó acerca del rescate arqueológico que esperan poder mostrar una vez terminadas las obras en la calle Mitre.

Un antecedente similar se dio en 1995 cuando un rejunte de objetos, encontrados a media cuadra del Centro Cívico, permitió conocer restos del viejo galpón del padre fundador Carlos Wiederhold.